Manuel Felguérez: Tiempos de Ruptura

Una exposición que explora la figura de Manuel Felguérez como representante de la ruptura, así como sus lazos estéticos y teóricos con otros artistas de este movimiento.

La ruptura

El periodo de la ruptura marcó un importante cambio en el arte en México, el cuál se encontraba repasando las enseñanzas de la ya consolidada Escuela Mexicana de Pintura impulsada por los llamados “tres grandes”, Orozco, Rivera y Siqueiros, apoyados por el propio estado nacionalista. Acaparando los fondos y la atención pública, Siqueiros llegó a decir: “No hay más ruta que la nuestra”.

Sin embargo, la hubo. Un grupo de artistas jóvenes que habían viajado a europa y habían entrado en contaco con el arte de vanguardia se posicionaron en contra de la oficialización nacionalista del arte, autodeterminandose incluso como “antinacionalistas”, optando por reconocer los valores universales del arte, favorecer la expresión individual y crear sus propios escenarios de reconocimiento.

Este grupo de artistas priorizó la experimentación plástica en contra del llamado “Realismo Socialista” de sus predecesores, daban mayor importancia al color, a la composición, a la forma y a la técnica siendo llamados por el público general como “abstractos”.

Los primeros índices de un cambio de paradigma llegaron con los artistas que Octavio Paz denominaría los “Modernistas Solitarios” una serie de individuos aparentemente aislados y con diferencias plásticas, pero unidos por sus principios. Dentro de este primer grupo encontramos a Rufino Tamayo, Mathias Goeritz, Juan Soriano y Gunther Gerszo.

Estos se involucraron activamente con la nueva generación de artistas, siendo incluso Tamayo denominado “El decano de la generación de la ruptura” y participando junto con ellos en diversas exposiciones. Uno de los artistas más destacados de esta generación es sin duda Manuel Felguérez, un jóven zacatecano que encontró su vocación plástica desde temprana edad y que sería una figura clave para definir la ruptura, escribiendo el texto que presenta a esta generación en la exposición en el Museo de Arte Carrillo Gil “Ruptura 1952 - 1965” de la cual toma nombre.


Felguérez es conocido por su experimentación constante, su determinación y la preocupación por los valores plásticos. lo que lo llevó a tener distintas etapas, una temprana, en la que desarrolló múltiples murales de desecho en sitios específicos, uno segundo, llamado “abstracto”, en el que la intuición toma primicia, y uno tercero, conocido como “La máquina estética”, en el cual desarrolló diversas piezas de la mano de las primeras computadoras, desglosando en conjunto las bases de la creación plástica, desde las formas geométricas, pasando por el color y llegando a la composición.

Los compañeros de Felguérez fueron Vicente Rojo, Pedro Coronel, Aceves Navarro entre otros, y el eco de sus reflexiones resuena en artistas posteriores como Gabriel Macotela, los hermanos Castro Leñero e Irma Palacios. Así como en aquellos artistas que resuenan con sus principios como Joy Laville y Sebastián.